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Capítulo 2 : Skull & Bones

Otra aburrida y tranquila semana en este ” maravilloso hotel ” que es Klescher ; no hay nada como vivir del estado , donde sus leyes y derechos te permiten vivir a cuerpo de rey , con una cama además de un plato caliente cada día , sin tener que matar a nadie para conseguirlo, malditos estúpidos , no se puede ser más gilipollas. Realmente me siento como en casa , con multitud de comodidades además de la oportunidad de conocer a gente muy curiosa; sin ir mas lejos, me he topado con una serie de gente , no sabría decir si son una banda organizada o un grupo de gente de cerebro desordenado; se hacen llamar ” Las Señoritas ” . A día de hoy aún no sé a qué se dedican ,pero parece que son un@s profesionales de la limpieza , pues entran con los reclusos en sus celdas y al rato salen muy contentos los 2. También me han comentado que se dedican al suministro de productos de higiene como el jabon en las duchas del centro , aunque yo aún no los he visto. Los puedes distinguir por una serie de tatuajes, ya sea en sus extremidades o cualquier parte del cuerpo.. Diría que es un puerco espin o algo parecido , aunque no podría asegurarlo con exactitud, pues no he tenido el placer de contratar sus servicios , pues a mi me gusta como está mi celda.
Creo que después de varias semanas aquí a cuerpo de rey, disfrutando de unas pequeñas vacaciones financiadas, es momento de “convencer” a uno de los guardias con mi poder de convicción (no creo que una punta de lanza en el cuello sea la causa real) de que acceda a borrar mis cargos en el sistema y darme los códigos de acceso de las puertas de salida.. ¡Ya es momento de reunirme con mis camaradas!!

Tras realizar una pequeña salida nocturna hasta la superficie y emprender un vuelo hasta la ciudad más cercana, compruebo la tabla de registros de la organización, donde se destaca un artículo de mi capitán “La Rata” PPilotx, comentando, que le han llegado a oídas que nuestro último “trabajo” no fue del agrado de alguno de nuestros “socios”. Parece que nuestros métodos son demasiado expeditivos. ¿De verdad que merecemos comentarios como esos? Acaso somos una ONG ? Creen que somos las hermanitas de la caridad? ¿Esperaban que pidiéramos permiso para matarlo? Somos PIRATAS y los piratas no piden permiso. Los piratas cogen lo que quieren y lo que necesitan sin preguntar a nadie, por ello nos enorgullecemos de blandir esa bandera donde la calavera es una marca de respeto y terror para nuestros adversarios.
Parece que nuestro grumete, un tipo que habla mucho y escucha poco, está en busca de nuevos afiliados por toda la galaxia, no siempre con éxito, pero si muy incisivo; aunque realmente no sé si el lugar donde los busca es el adecuado, pues cada vez que nos presenta uno, es más joven que el anterior… hoy nos ha presentado a un nuevo compañero, de voz ” madura y tenaz ” el cual, no sé si asustado, desapareció a los 5 min y nunca más se supo de Él. A veces me pregunto si mi capitán me paga lo suficiente para aguantar esto.